Estrategias para que los adultos mayores sin familiares puedan gestionar su atención y bienestar a largo plazo.
Hoy en día, hay más adultos mayores que nunca que no cuentan con familiares cercanos ni cuidadores de los que puedan depender. Se espera que este número aumente a medida que nuestra sociedad envejezca. A menudo denominados “huérfanos de la tercera edad” o “adultos mayores solos”, este grupo necesita atención y recursos específicos para garantizar su bienestar. La creación de un plan de atención individualizado y una mayor visibilidad en la comunidad pueden marcar una diferencia significativa en su calidad de vida a largo plazo y en sus resultados médicos.
Si eres o serás un adulto mayor solo, es esencial que tomes las riendas de tu situación actual para prepararte ante posibles crisis médicas inesperadas o el deterioro de tu estado de salud con el tiempo. Buscar grupos y recursos en línea que apoyen a los “huérfanos de la tercera edad” o “adultos mayores independientes” en tu área es un primer paso valioso. Pero, además, hay medidas que puedes tomar para preparar tu plan legal y financiero, asegurando que tus necesidades sean atendidas de manera efectiva.
Piensa en el Futuro: Planifica Vivir Hasta los 100 Años
Hay muchas acciones que puedes llevar a cabo de manera eficiente para establecer un plan de cuidados que funcione para ti. Con reflexión sincera y un compromiso serio, podrás tomar decisiones que te apoyen, ya sea que necesites ayuda mañana o que vivas hasta los 100 años.
Primero, crea tu propia lista de verificación de objetivos y necesidades. Realiza una evaluación general de lo que requieres en términos de atención. Imagínate como tu propio cuidador; ¿qué necesitarías para desempeñar esa función de manera adecuada? Este ejercicio de introspección te ayudará a entender mejor tus necesidades y a establecer prioridades.
Una vez que tengas claro lo que necesitas, comienza a preparar (o a actualizar) tus documentos básicos de atención de por vida. Es fundamental contar con la asesoría de un abogado especializado en planificación de atención médica y financiera. Esto no solo implica redactar y firmar documentos, sino también establecer un marco que minimice riesgos y maximice la probabilidad de que se respeten tus deseos en caso de que algún día no puedas expresarlos. Un abogado calificado puede orientarte sobre opciones como directivas médicas anticipadas, fideicomisos, designaciones de beneficiarios, y declaraciones de tutores.
Además, el abogado puede explicarte las medidas preventivas adecuadas para un adulto mayor solo, como nombrar a un protector de fideicomiso o cuándo y cómo planificar para calificar para beneficios públicos que cubran la atención médica a largo plazo. Esta colaboración puede resultar invaluable en momentos críticos, brindando seguridad y tranquilidad.
Planifica en Caso de Enfermedad… y de Salud
Es igualmente importante preparar un plan financiero exhaustivo que contemple tanto la posibilidad de una incapacidad prematura como el disfrute de una vida prolongada. Si estás empleado actualmente, investiga si tu empleador ofrece beneficios de jubilación, seguro de atención a largo plazo, o discapacidad a corto o largo plazo. Considera cuidadosamente las ventajas y desventajas de estos beneficios, ya que pueden influir significativamente en tu seguridad financiera futura.
Forma Tu Equipo de Atención para el Futuro
En ausencia de familiares o amigos cercanos que puedan brindarte apoyo, es esencial que determines quién formará parte de tu círculo de confianza. Entiendo que para muchos que leen este artículo, la sensación de soledad puede ser abrumadora. Sin embargo, personas como empleadores, abogados, planificadores financieros, agentes bancarios y contadores pueden servir como controles y contrapesos en tu plan de atención.
Además, considera incluir en tu equipo a consejeros espirituales, administradores de atención, asesores y trabajadores sociales, así como a tus proveedores médicos. Escoge con cuidado los miembros de tu equipo, investigando su reputación en la comunidad y asegurándote de que no existan conflictos de interés. Consulta con varios profesionales para tener una idea clara de quiénes son y si te sientes cómodo utilizando sus servicios.
Aunque todo este proceso puede parecer abrumador y requerir mucho esfuerzo, te agradecerás a ti mismo por haber invertido tiempo en crear un plan de atención para adultos mayores solos. El tiempo y dinero que inviertas ahora se traducirán en beneficios significativos para tu salud, finanzas y seguridad en el futuro.
Conclusión
Prepararse para la vejez y las incertidumbres que esta conlleva no es solo un acto de responsabilidad; es una inversión en tu tranquilidad y bienestar. Con un enfoque proactivo y la creación de una red de apoyo, los adultos mayores solos pueden no solo sobrevivir, sino prosperar en esta etapa de la vida. A medida que más personas se convierten en “huérfanos de la tercera edad”, es crucial que la sociedad en su conjunto se movilice para proporcionar recursos y crear comunidades inclusivas que cuiden y respeten a nuestros mayores.
Equipo Kuidales,
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